López Obrador fundamentó su decisión para atender una petición que le hicieron firmas del llamado "Grupo Monterrey".
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo en estas horas que afectaron a las empresas automotrices y de autopartes retomar sus operaciones en el país, una vez que se reactivo esta industria en Estados Unidos, para no afectar la altamente integrada cadena de suministro en Norteamérica
El mandatario especificado en su conferencia de prensa diaria que tomó la decisión de atender una petición que le hicieron firmas del llamado "Grupo Monterrey" en una reunión el martes en el Palacio Nacional.
La mayoría de las plantas automotrices en México suspendió sus operaciones en marzo para frenar la propagación del coronavirus y debido a la falta de insumos causada por el brote que ha contactado a 1.4 millones de personas en el mundo y amenaza con desencadenar una profunda recesión.
Tras el decreto de emergencia sanitaria emitido a multas del pasado, los armadores de vehículos y los fabricantes de autopartes no fueron catalogados como actividades esenciales que pueden mantener parte de sus operaciones.
Lo anterior llevó a gremios como la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), y la agrupación que reúne a los fabricantes de camiones (ANPACT) para solicitar su inclusión en la lista.
“Hablaron en nombre de las empresas automotrices y de autopartes (…) Que sí, ya tienen conocimiento de que un día se va a abrir la rama automotriz en Estados Unidos (…), y que a partir de ahí están autoricemos de tres a cinco días abrir aquí para que les dé tiempo de echar a andar sus plantas y embonar (...) la cadena de producción ”, dijo López Obrador.
"Les dije que sí", agregó el mandatario sobre su reunión con el "Grupo Monterrey".
A ese encuentro asistió representantes de firmas como Cemex, Grupo Alfa, Vitro, Frisa y Grupo Proeza, que le recomendaría al presidente centrarse en reducir la incertidumbre y generar confianza, según información en un comunicado el martes.
En su reciente exhorto al gobierno, la AMIA argumentó que la industria automotriz aporta el 3.8% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional y genera cerca de 980,000 puestos de trabajo de la dependencia poco más de 3.6 millones de mexicanos, según sus informes con base en datos oficiales.
Los fabricantes mexicanos de camiones y autobuses agrupados en ANPACT, por su parte, aconsejaron el cierre de sus plantas y de las autopartes como medida para enfrentar la epidemia del coronavirus podría poner en riesgo la cadena de suministro en México y Estados Unidos.
Con información de Forbes.